Diferencias entre el herpes y las aftas labiales

¿Afta o Herpes labial?

¿Te ha aparecido una lesión en tu boca y no sabes qué puede ser? No te preocupes a lo largo de este post, te explicamos la diferencia entre ambas afecciones y te sacamos de dudas. ¡Quédate!

Las lesiones bucales pueden ser variadas, entre las más comunes están las aftas y el herpes bucal que, aunque a simple vista parecen lo mismo en realidad, son diferentes. ¡Lo vemos!

¿Cómo diferenciar el Afta bucal del Herpes labial?

Lo primero que debes saber es que si bien es cierto que ambas son enfermedades bucodentales y se parecen bastante, sus orígenes son diferentes. Mientras que las aftas pueden darse por bacteria, virus, alergias, irritación en la boca o incluso por morderse la lengua o los labios; el herpes bucal solo se produce exclusivamente por causa del virus Herpes Simple. El virus, aunque no se manifieste en una úlcera, puede vivir en el cuerpo por unos años y aparecer sólo cuando algo lo active como puede ser otra enfermedad, por lo general en aquellas en cuadros donde haya fiebre, los cambios hormonales o incluso la exposición al sol.

¡Atenta! Profundizamos un poco más.

¿El tratamiento que debo seguir es el mismo?

La respuesta es clara, NO. Son cosas distintas, por lo tanto, el tratamiento también lo es.

• Si tenemos aftas bucales, más conocidas como llagas en la cavidad bucal, debemos saber que no hay que utilizar un tratamiento en concreto para que se eliminen, ya que lo hacen por sí solas con el paso del tiempo y de forma automática. Si bien es cierto, que en Farma13 contamos con unos productos específicos para su uso, que aceleran el proceso de cicatrización y por tanto, nos ayudan a acabar con ellas mucho más rápido que si no utilizásemos nada. ¿No los has probado? ¡Consíguelos aquí! En cuanto a las causas de la aparición de aftas son tan diversas, que hasta los mismos profesionales no pueden determinar la particularidad de cada caso.
•  Si tenemos un Herpes bucal, no existe ningún tratamiento específico que elimine el herpes por completo. Debido a que es un virus, una vez que entra en el organismo, permanecerá siempre, aunque de forma inactiva, para tener reapariciones ocasionales. Sin embargo, el tratamiento con antibióticos ante la aparición de brotes, ha demostrado hacer de la recuperación un proceso más rápido, y fundamentalmente ayuda a cortar el contagio y el dolor.

¿Cuándo desaparecen?

No se puede saber con exactitud, pero la duración estimada para el Herpes bucal normal suele ser de 14-15 días desde el momento de la aparición de dolores en la zona. En cuanto a las aftas bucales, suelen desaparecer a la semana o a los pocos días desde su aparición, dependiendo del tamaño y el motivo que haya originado su aparición.

Si los síntomas permanecen por más tiempo del que te gustaría y del que indicamos, consúltalo con tu médico de confianza o tu dentista particular.  

¿Cómo diferencio un afta de un herpes labial?

1. Fíjate en el aspecto: Las aftas aparecen en el interior de la boca, en la mayoría de sus casos. Se presentan en los tejidos blandos, como lo son las mejillas, las encías y debajo y encima de la lengua. Las aftas se ven como pequeños círculos blancos o amarillos con un borde rojo que pueden causar molestias al comer y al beber. En cambio, los herpes labiales, por otro lado, suelen presentarse en y alrededor de los labios. Suelen aparecer como una acumulación de ampollas que pueden reventar, momento en el cual puede salir un líquido y quedar una costra.

2. Origen de la aparición: Las aftas y los herpes labiales son causados por condiciones diferentes. Los herpes labiales son el resultado directo del virus del herpes y existen varios factores que pueden desencadenar la aparición del herpes labial entre los que encontramos:

• Principal motivo: El Estrés.
• Otras infecciones víricas y fiebre.
• Épocas de fatiga y agotamiento
• Bajadas intensas de defensas
• Exposición al sol o al viento.
• Cambios hormonales.

En cuanto a las causas de origen de un afta bucal, destacamos:

• Mordidas accidentales
• Estrés
• Falta de sueño
• Carencia de ciertas vitaminas, como la B12
• Tabaquismo
• Reflujo gastroesofágico
• Trastornos hormonales
• Algunos medicamentos, como los antiinflamatorios
• Heridas provocadas por la ortodoncia

3. Duración: Las aftas labiales suelen curarse por sí solas antes que los herpes labiales, que son algo más lentos en desaparecer. Además, los herpes labiales no suelen dejar cicatrices, mientras que las aftas grandes sí pueden llegar a tener este resultado.

4. Contagio: A diferencia de las aftas, los herpes labiales son contagiosos. Por ello, con el fin de evitar transmitir el virus, es importante que no compartas utensilios ni ningún objeto que toque tu boca con nadie más hasta que el herpes haya desaparecido por completo.

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